DESCRIPCIÓN DEL PROYECTO
La idea principal en líneas generales consiste en la realización de un Inventario del Patrimonio con su correcta identificación y localización de los distintos yacimientos de carácter arqueológico y etnográfico, ubicados en el área del Término Municipal de Santomera, algunos de ellos identificados en la Carta Arqueológica tras los sucesivos trabajos de Jiménez Lorente, S., Ayala Juan, M.M. & Navarro Hervás, F. (1998 y 1999), la prospección de Mª Cristina González Gómez en 1996, o la actualización en 2010 en el proyecto “Adaptación de la carta arqueológica de la Región de Murcia a los procedimientos de declaración de yacimientos como bienes de interés cultural, bienes catalogados o inventariados” realizado por Grupo Entorno.
Se dividirá en varias fases en función del desarrollo de los trabajos de campo, laboratorio y sus correspondientes publicaciones. Durante las mismas se centrarán los trabajos en las elevaciones naturales del terreno debido a no estar alterados por la acción antrópica y zonas susceptibles a la existencia de elementos pese a estar roturadas o removidas por el ser humano. Incluye las siguientes elevaciones siempre centrados la parte correspondiente al T. M. de Santomera: El Cerro Bermejo, La Loma del Barranco Largo, Rincón de los Cuadros, Cabezo del Trigo, Sierra de Orihuela, Cabezo Morales, Entorno del Embalse que incluye el cabezo de Los Asperos, Hoya de los Ásperos, Casa de Balchila, Los Clementes, Los Aceros, Las Carreras, La Cañada Pérdida y el Puerto Zacacho y la Sierra del Balumba.
Estos trabajos irán orientados al estudio y concreta delimitación de los yacimientos arqueológicos existentes así como la incorporación de nuevos, no obstante y aunque no es objeto de este estudio se contempla la recogida y documentación de elementos de carácter etnográfico, geológico o natural que tengan interés patrimonial.
ANTECEDENTES
Los restos arqueológicos más antiguos encontrados hasta ahora en Santomera, corresponderían a un taller de sílex ubicado en uno de los cerros que flanquean las ramblas Salada y Ajauque a través de los trabajos de prospección realizados por Maria Manuela Ayala y Sacramento Jiménez. Las autoras del estudio apuntaban una hipótesis de cronología para éste, que tendría el Eneolítico como periodo cultural tope.
El taller forma parte del conjunto de talleres de sílex al aire libre localizados en la divisoria de aguas de las ramblas Salada y Ajauque. Tras la actualización en 2010 se catalogaron tres de los talleres descubiertos en las anteriores campañas bajo la protección de la ley 4/2007 (Talleres 11, 12 y 19) mientras que el resto (Talleres 17, 18, 20 y 21) quedaron descatalogados por escasa información, falta de identidad o ser hallazgos aislados.
Contemporáneos a estos talleres podrían haber sido los habitantes del poblado Calcolítico del Cabezo Malnombre, cuyos restos más antiguos parecen proceder de esa época a juzgar por la prospección realizada en 1996 para la elaboración de la Carta Arqueológica del Término Municipal de Santomera por Cristina González. La situación de este Cabezo, a tan solo 500 metros al oeste de una explotación minera de cobre, sobre fértiles tierras de cultivo y no muy lejos de los talleres antes mencionados, podría haber condicionado este asentamiento, el cual tendría una continuidad cultural. La Cultura del Argar está representada en los yacimientos de La Mina y la Sierra del Balumba – Sector Argárico. Ambos poblados están situados en cerros de altura considerable con respecto al valle del Segura al que están orientados. La distancia aproximada entre ellos es de 2 km. Su ubicación estratégica con respecto a la vía de comunicación que supone el citado valle, obedece también a la explotación de recursos minerales situados en su entorno inmediato. La ocupación de la Sierra del Balumba-Cobatillas la Vieja concluye en época ibérica con una etapa propiamente ibérica, que ocupa la cumbre, de fines del siglo V al III a.C., donde aparecen cerámicas áticas y campanienses.
La presencia romana hasta el momento está atestiguada en el yacimiento de la Mina con la localización de algunas cerámicas comunes y terra sigillata.
En época Medieval el poblamiento islámico aparece de nuevo en el Cabezo Malnombre, definido como un asentamiento estratégico, ubicado en las laderas de este cerro desde el cual la visibilidad sobre el valle es muy amplia. Las primeras referencias al nombre de Santomera datan de 1272, cuando se hicieron los repartos de huertas subsiguientes a las reconquistas de Alfonso X el Sabio y Jaime I el Conquistador. El rey Sabio mandó repartir los heredamientos de la ciudad de Murcia entre los castellanos y catalanes que le habían acompañado. Entre ellos aparece el pago de Santomera y la acequia de la Aljufia como zona a repoblar. En 1393 habitaba Santomera la familia Tornel, de origen francés y que habían ayudado desde Valencia a la conquista.
El obispo Comontes (siglo XV) cita Santomera con Beniel, el Raal y el Faro como tierras que forman una sola renta a pagar a la Iglesia y al Rey. De esta época son los Andúgar, apellido muy frecuente en este pueblo. En el siglo XVI se agrega Santomera al Mayorazgo de Beniel, propiedad de los Junterones. Después de las terribles inundaciones de 1528 y 1545, se hizo necesario un nuevo reparto de las tierras de Urdienca, Monteagudo y Santomera (Frutos Baeza, 1988). El segundo marqués de Beniel, D. Gil Antonio y Gonzaga, formó en 1737 unos preciosos jardines en Santomera, al disponer de agua para riego. El curato de Santomera reunía entonces doscientos vecinos, que rendían como arrendatarios. Después de la Guerra de Sucesión, el siglo XVIII es de paz y prosperidad. En el año 1785 aparece Santomera como “lugar de realengo” con alcalde pedáneo. Se separa en esto años de la parroquia de Beniel, agregándose en 1794 la parroquia del Campo de la Matanza.
En 1836 se transformó Santomera en villa constitucional con su ayuntamiento. La poblaban 733 vecinos y 3.078 habitantes. Por reales órdenes de 10 de septiembre de 1848, se suprimieron varios ayuntamientos constitucionales, entre ellos el de Santomera, quedando agregados sus distritos al término municipal de Murcia. En 1978 volvió a ser independiente.
EQUIPO
Contamos con un equipo de técnicos profesionales especializados en diversas áreas, y que casi en su totalidad pertenecen a Santomera o están vinculados a esta localidad. Dado el carácter arqueológico pero también etnográfico del estudio prospectivo, contamos con especialistas en arqueología, historia, historia del arte, geografía, biología y geología, filología clásica, así como un número variado de alumnos de grado vinculados a las materias citadas. El equipo en su mayoría cuenta con un número mayor de arqueólogos (once), entre los que destaca la presencia de varios doctores en Prehistoria y Arqueología vinculados a la Universidad de Murcia.
Para el presente proyecto contamos con el apoyo y colaboración el Ayuntamiento de Santomera y su Concejalía de Juventud, Cultura, Patrimonio, Turismo, Medio Ambiente y Agricultura, la Universidad de Murcia y su Departamento de Prehistoria, Arqueología, Historia Antigua, Historia Medieval y Ciencias y Técnicas Historiográficas, así como el CEPOAT (Centro de Estudios del Próximo Oriente y la Antigüedad Tardía de la Universidad de Murcia). También con el apoyo de otras asociaciones como la Asociación Cultural de Estudios Protohistóricos y Arqueología.
RESULTADOS DE LA PROSPECCIÓN